Conflictos en la empresa, jefes sin dinero y empleados frustrados
En varias ocasiones nos han llamado para ayudar a recuperar las continuas pérdidas de ingresos debido a una mala gestión.
En varias ocasiones nos han llamado para ayudar a recuperar las continuas pérdidas de ingresos debido a una mala gestión.
Nuestra labor ha comenzado siempre conversando con cada empleado, para entender su punto de vista y escuchar su opinión. Y casi siempre, encontramos que sin darse cuenta los empleados se encuentran saboteando su propia labor diaria.
Una de las empresas estaba a un paso de la quiebra después de 9 años de éxitos y ya no tenía más recursos económicos. Le dijimos: “vamos a intentarlo, y si lo conseguimos reestructuramos toda la plantilla”. Reto aceptado.

El miedo de un empleado al fracaso cercena su éxito y de reflejo, el de tu empresa.
El desastre está a la vuelta de la esquina
Tras la renuncia del director de ventas para irse a otra empresa, se promueve a uno de los vendedores para ser el nuevo director. Esta persona pasó de estar a cargo de sus propios resultados, a tener que dirigir a otros 14 vendedores que anteriormente eran sus compañeros, diseñar la estrategia de ventas y encargarse de todo lo que implica hacer funcionar el motor principal de una empresa: las ventas.
Del siguiente gráfico lo que se desprende es que, tras el cambio, había empleados que por miedo a no conseguir el resultado de ventas esperado por el jefe, tenían aterrorizado a su propio equipo.
Cuando nos contrataron en enero, vimos muy claramente gracias a nuestros análisis que el problema existía en los equipos de ventas. Al cabo de 3 semanas de entrevistas con todos los miembros, aconsejamos a RRHH dar formación al nuevo director de ventas con base en nuestra estrategia Agile.
Los resultados no tardaron en llegar y a los dos meses, se empezaron a ver los frutos de una recuperación financiera.
Gracias a este primer equipo de éxito, el estilo de gestión Agile se implantó en la empresa a nivel global y hoy por hoy, el facturado se ha duplicado desde que terminamos nuestro trabajo y sigue en constante crecimiento.
